Lo “eco”, como algunos lo denominan, no es una moda, no es una opción, es la única alternativa indiscutible, aunque haya quien se empeñe en lo contrario, de caminar hacia el futuro; al menos hacia uno sostenible, al menos hacia uno respetuoso con nuestro entorno y saludable para nosotros mismos. Si somos conscientes de esta clara realidad, capaces de interiorizarla e incluso de ponerla en práctica cuando producimos bienes o prestamos servicios, nos será mucho más fácil acercarnos a un término, el de ecoBranding, que no hace sino involucrar la fase de branding (aquella que versa sobre hacer y construir una marca) en esta nueva mirada hacia lo ecológico y sostenible, hacia lo inevitable.

Índice de contenidos

  1. EcoBranding: una aproximación al término.
  2. Interbrand Paris y el nacimiento de un concepto.
  3. Diferencias entre ecoDiseño y ecoBranding.
  4. Más allá de la optimización de logos.
  5. Aumentar la sostenibilidad sin renunciar a los objetivos.

 




1. EcoBranding: una aproximación al término

¿Qué es ecoBranding? Desde luego, mucho más que una forma de lavar la imagen de una corporación o de subirse al carro del postureo. EcoBranding significa introducir el respeto hacia el medioambiente y hacia los derechos humanos como valores intrínsecos de una empresa y, por tanto, de una marca. En otras palabras, se trata de convertir la sostenibilidad en un pilar fundamental de toda actividad, producto o acción que desarrolle una entidad con los siguientes objetivos: reducir su impacto o huella ecológica, aumentar la eficacia y eficiencia de sus procesos, optimizar los recursos y disminuir los costes. Todo ello sin menospreciar el nivel de calidad exigido, los criterios estéticos marcados o los objetivos empresariales fijados de antemano.




2. Interbrand Paris y el nacimiento de un concepto

Interbrand Paris acuñó el término ecoBranding y se posicionó como la primera agencia en convertir las marcas y sus productos en “actores activos y positivos hacia la transición eco”. De hecho, lo hizo de forma pionera a través de acciones que lograron una gran repercusión mediática como, por ejemplo, sus propuestas a grandes corporaciones de logotipos sostenibles, es decir, imágenes de marca capaces de reducir el consumo de tinta hasta en un 35 % de la mano de cuidados diseños que no restaban ni un ápice de fuerza visual o esencia al logotipo tradicional de esas multinacionales. En otras palabras, un diseño de marca más ecológico que la agencia dio a conocer bajo el término ecomarca en 2017 con el fin de reducir el impacto ambiental.

Desde entonces, muchas otras agencias han querido seguir los pasos de Interbrand pero muy pocas han cosechado un éxito rotundo, quizás porque les ha faltado cierto arrojo a la hora de implementar un modelo que ha de intervenir de manera decisiva en todas y cada una de las fases de creación de una marca, sus productos y sus servicios, quizás porque no han encontrado clientes con la suficiente sensibilidad para ello.




3. Diferencias entre ecoDiseño y ecoBranding

Ríos de tinta corren sobre el concepto de ecoDiseño, sin embargo, poco se ha hablado o debatido hasta ahora sobre ecoBranding, un término mucho más amplio que trasciende lo meramente visual para interceder en el proceso de estrategia y desarrollo de una marca, pero también de sus productos y servicios, de manera integral desde el punto de vista de la sostenibilidad.

Tanto es así que es esta última la que, en ecoBranding, ha de guiar los pasos de todos los profesionales involucrados en la concepción, diseño, producción, almacenaje, transporte, lanzamiento y publicitación de un bien o servicio, garantizando así la coherencia del proceso completo (incluso del empaquetado o del sistema de almacenamiento), de su optimización y de su adecuación a criterios de sostenibilidad, todo ello bajo una visión única y global.

Debemos ecodiseñar para que los productos sean más duraderos, procedentes de materias primas recicladas en la medida de lo posible, 100 % reciclables y reutilizables, pero debemos adoptar una visión mucho más completa y universal, aquella que nos proporciona el ecoBranding, si queremos además contribuir de manera definitiva con nuestros actos a preservar el mundo tal y como hoy lo conocemos.




4. Más allá de la optimización de logos

Si buscamos la palabra ecoBranding en la red encontramos múltiples entradas que versan sobre un nuevo enfoque para diseñar, en especial logotipos, con el fin de reducir hasta en un 35 % el uso de tinta y los gastos asociados a este consumo desde el punto de vista empresarial.

La mayor parte de los contenidos que leemos se quedan en tan solo eso, la punta de un gran iceberg dedicada en exclusiva al diseño gráfico y que poco o nada nos cuenta sobre coherencia, sobre máxima implicación de los responsables de branding en la cadena de valor de un producto o servicio, o sobre sostenibilidad como instrumento y como fin.

El ecoBranding requiere un esfuerzo mayor, el de implementar criterios sostenibles como parte de la cultura y responsabilidad social corporativa de cualquier organización, pero también de sus valores, misiones y expectativas. Porque la apuesta hacia el respeto, la seguridad, la equidad y la transparencia precisa de la implicación de cada departamento, de cada trabajador, y de un conocimiento preciso y exhaustivo del proceso de creación de esa marca o producto por parte de quienes tienen la tarea de ecorredefinir dichos conceptos. Ese es el desafío.




5. Aumentar la sostenibilidad sin renunciar a los objetivos de la organización

Adoptar un enfoque medioambiental no significa dar de lado la belleza, la utilidad o el atractivo de, por ejemplo, un bien de consumo. Nada más lejos de la realidad. El ecoBranding no menoscaba, en nombre de la sostenibilidad, dichos atributos o funcionalidades, sino que los refuerza otorgando a esas características un plus sustentado en conceptos como el de economía circular.

El atractivo de un bien es mayor cuando este se asienta sobre firmes convicciones que respalda la mayor parte de los consumidores. Hablar de ecoBranding es, en definitiva, hablar de ética empresarial.

(Imagen Noah Buscher on Unsplash)